Clavos. Uno a uno. Hasta que surge una imagen.

¡Bienvenido! Me llamo Ruben y soy el creador de estas obras con clavos. Cada pieza está formada por miles de pequeños clavos, colocados a mano con cuidado, precisión y mucha paciencia. Sin hilo, sin pincel. Solo miles de clavos que se unen para formar una imagen.

El origen de este trabajo no está solo en la creatividad, sino también en la necesidad. Tras un período difícil en mi vida, buscaba algo que me diera nuevamente dirección – algo por lo que levantarme, algo en lo que perderme. Con una formación en diseño gráfico y una fascinación por las matemáticas, los patrones y las estructuras, comencé a experimentar con materiales y técnicas.

Lo que comenzó como un pasatiempo se convirtió en una pasión. Mi fascinación por la estructura y las matemáticas empezó con el arte con hilos, pasó por los patrones de Voronoi y desembocó en el arte con clavos que creo hoy en día: un trabajo puntillista con clavos como puntos.

Los cuadros de clavos son el resultado de un proceso en el que la tecnología y el arte se fusionan perfectamente. Con software desarrollado por mí, visualizo imágenes, determino la colocación exacta de decenas de miles de clavos y doy vida a la abstracción. Incluso la máquina que utilizo – una instalación CNC hecha a medida – fue diseñada y construida por mí. Así mantengo el control total sobre cada detalle: desde el diseño hasta la ejecución, desde la programación hasta la colocación de los clavos. Incluso la visualización y animación 3D de mis obras la realizo por mi cuenta. Es un proceso intensivo, ¡pero nada me da tanta satisfacción!

Este arte no es un producto en masa, sino un camino personal. Cada obra cuenta una historia, no solo por su imagen, sino también por el proceso que la hizo posible.

Me alegra que hayas llegado a mi sitio web. No dudes en ponerte en contacto si quieres saber más o simplemente saludar.